Carta de la editora
Por Ana Cubías
El Nuevo Sol, 23 de mayo de 2007
(English Version Included)
He sido la editora de El Nuevo Sol por dos semestres consecutivos y por ello he tenido la oportunidad y la responsabilidad de coordinar ésta, la edición más grande que el periódico estudiantil haya publicado en sus ya casi cinco años de existencia. La publicación es sólo una parte de un proyecto multimedia más grande que incluirá un programa de radio y un sitio Internet con texto, audio, fotografías y segmentos televisivos.“Relatos contra el silencio: El sida en la comunidad latina” (Stories Against the Silence: AIDS in the Latino Community) se convirtió primero en un periódico de 48 páginas, el cual requirió mucho esfuerzo y dedicación de parte de un grupo de futuros periodistas, artistas y fotógrafos. He tenido la suerte de ver crecer este proyecto día tras día con la ayuda de mis compañeros, y hoy puedo decir que es una misión cumplida. El objetivo principal de este proyecto es mostrar el lado humano del VIH/sida, una epidemia que está creciendo entre la comunidad latina, por medio de historias personales de quienes sufren de sus consecuencias. Al mismo tiempo, queremos informar acerca de la epidemia y del trabajo de algunas de las organizaciones que luchan por prevenirla.
En la primera parte de esta edición presentamos una recopilación de relatos contados por las personas (pacientes y voluntarios) que viven en La Casa Hogar Las Memorias. El albergue, donde viven aproximadamente 35 enfermos, es un sitio dedicado al cuidado de personas de bajos recursos que sufren el VIH/sida. Este albergue, el cual es auspiciado por el Centro de Integración y Recuperación para Enfermos de Alcoholismo y Drogadicción (CIRAD), se encuentra ubicado en la colonia La Morita de la ciudad de Tijuana, México, muy cerca de un parque industrial con docenas de maquiladoras. La mayoría de las medicinas son suministradas por el gobierno mexicano bajo la cobertura del Seguro Popular.
Al ser un organización que brinda ayuda gratuita a tantos pacientes de sida y otras enfermedades, es insólito que no recibiera más ayuda privada y gubernamental, además de mayor cobertura en los medios de comunicación. Es por eso que un grupo de nueve estudiantes, bajo la supervisión de cuatro profesores y mentores, tuvimos la oportunidad de compartir con los pacientes y voluntarios de Las Memorias por cuatro días.
Mientras la camioneta en la que viajábamos al albergue se acercaba más y más a su destino, se podía sentir cómo todos los alrededores nos iban acercando a la realidad que íbamos a enfrentar. Por un camino extraviado, lleno de polvo y hoyos, y muy seguramente hasta desconocido para muchos de los residentes de Tijuana, nos encontramos frente a frente con el albergue. Para nuestra sorpresa, fuimos recibidos como familia, lo cual propició un ambiente de confianza y apertura.
Las historias que escuchamos y que hoy presentamos en forma de relatos periodísticos en esta edición se quedarán grabados en nuestras mentes porque le pusieron un rostro humano a esta enfermedad. Las personas que viven con el VIH/sida luchan constantemente en contra del estigma de la enfermedad, la ignorancia de una sociedad que prefiere no hablar de sexualidad y la indiferencia de los que creen que el sida es simplemente una enfermedad crónica como la diabetes. Por ello, los relatos que presentamos en este número son relatos de solidaridad, de amor, de lucha, ya que la mayoría de las personas que viven en el albergue ven la vida con un gran optimismo, con un espíritu de seguir adelante, de vivir.
La segunda parte del proyecto está dedicada a explorar cómo el sida afecta a la comunidad latina más cercana a nosotros: Los Ángeles. La primera historia de la segunda sección es el relato personal de un estudiante de la Universidad del Estado de California, Northridge (CSUN) que ha vivido con el VIH por catorce años. Su historia nos ayuda a entender cómo un joven latino de nuestra edad tiene que enfrentar el rechazo familiar, la enfermedad, el estigma social, la homofobia, el silencio, la búsqueda de identidad y la siempre presente posibilidad de la muerte. Luego, presentamos un reportaje expositivo acerca del sida en la comunidad latina, utilizando las estadísticas más recientes de la repercusión de esta enfermedad entre los latinos. De igual forma, hablamos con organizaciones cuya misión es educar a los latinos acerca cómo prevenir el contagio, como Bienestar, The Wall/Las Memorias, AIDS Walk, entre otras, las cuales coinciden en señalar la importancia de hacerse la prueba del HIV a tiempo. También incluimos un reportaje sobre cómo el arte ayuda a expresar y aliviar un poco el dolor y otro acerca de qué piensan los jóvenes de la epidemia.
Esta edición y el proyecto multimedia que aparecerá en radio y en un sitio Internet no habrían sido posibles sin la ayuda de organizaciones comprometidas al servicio de la comunidad latina y dedicadas a ayudar al crecimiento profesional de los estudiantes. Es por eso que queremos extender nuestro agradecimiento a la Fundación Scripps-Howard, la cual ha apoyado generosamente el programa de periodismo en español de CSUN, la Fundación California Wellness, la cual nos apoyó directamente en la elaboración de este proyecto multimedia relacionado con la salud, la Facultad Mike Curb de Artes, Medios y Comunicación de CSUN, la cual nos dio un apoyo monetario y logístico incondicional, y la organización sin fines de lucro The Wall/Las Memorias, la cual copatrocinó el proyecto con nosotros desde sus orígenes.
Por todo ello, nos entusiasma presentarles los relatos de Las Memorias y el impacto del VIH en Los Ángeles en esta edición especial del sida en la comunidad latina.
Ana Cubías
Editora de El Nuevo Sol
ENGLISH VERSION
Letter from the Editor
By Ana Cubías
El Nuevo Sol, May 23, 2007
As the editor of “El Nuevo Sol,” a Spanish-language publication that was born due to the need to have a newspaper where Spanish-speaking college journalists could practice their skills, I had the opportunity to be in charge of the largest edition ever published in its five years of existence at California State University, Northridge.
“Stories Against the Silence: AIDS in the Latino Community/Relatos contra el silencio: El sida en la comunidad latina” turned out to be a 48-page issue, which required a lot of effort and work from a group of future reporters, artists and photojournalists. Along with this issue, published on May 23, 2007, we also produced radio segments that were aired on “Nuestra Voz,” a public affairs show aired by the Pacifica Radio station in Los Angeles, KPFK, and were later ran as a special series by Fresno-based Radio Bilingüe. We also developed a multimedia Web site with photos, audio segments, soundslide show (audiovisual features) and some video.
The main goal of the project is to show the human side of HIV/AIDS in the Latino community and create awareness about the increasing rate of infection among Latinos. Using personal stories from people who suffer HIV/AIDS, we want to inform the public about AIDS and the work that several organizations are doing to prevent it.
In the first part of the articles published in the newspaper, and some of them translated into English in an abbreviated form for New America Media, we presented some profiles of patients and volunteers who lived in Casa Hogar Las Memorias, a hospice in Tijuana, Baja California. The hospice, where about 35 patients and volunteers live, served as a refuge and clinic for poor people with HIV/AIDS. The Centro de Integración y Recuperación para Enfermos de Alcoholismo y Drogadicción (CIRAD)/Center for Integration and Convalescence for those Ailing from Alcoholism and Drug Addiction, a non-profit organization based in Baja California, provides most of the financial support for the hospice.
Casa Hogar Las Memorias is located in Colonia La Morita, a poor neighborhood in the outskirts of Tijuana, near a large maquiladora park. The majority of the HIV medicines used in Las Memorias is provided by the Mexican government through a public insurance program known as “Seguro Popular” (Popular Insurance).
Being an organization that provides free help to many patients, Casa Hogar Las Memorias receives only few private donations and no government aid. The place has not received too much media attention in spite of the important work they do. It was for this reason that nine students, under the supervision of four professors and mentors, had the opportunity to spend four days with volunteers and patients of Casa Hogar Las Memorias in April 2007.
The stories that we were told are going to stay forever in our minds because they put a human face to the HIV/AIDS epidemic. People who live with HIV/AIDS constantly struggle with illness, stigma and ignorance of a society that prefers not to talk about sex. The profiles of people who live in Casa Hogar Las Memorias are not stories about people who feel they are victims, they are stories of solidarity, love and struggle because they see life with optimism and they keep a positive attitude towards others.
The second section of the newspaper was devoted to explore how HIV/AIDS affects the Latino community in Los Angeles County. The first story was a personal essay of a student from California State University, Northridge, who has lived with HIV for 14 years. His story helped us understand how a young Latino, like us, has struggled with difficult issues, such as family rejection, social stigma, homophobia, search of identity and the possibility of death. In that section, we published explanatory stories about HIV/AIDS in the Latino community. We also profiled organizations that are devoting efforts to educate Latinos about HIV/AIDS prevention.
The newspaper, the multimedia site and the radio segments would not have been possible without the help of organizations that are engaged to help the community and the professional growth of young journalism students. For this, we thank the Scripps-Howard Foundation for supporting our Spanish-language program at California State University, Northridge, the California Wellness Foundation, which directly supported the elaboration of the multimedia project related to HIV/AIDS, and to the Mike Curb College Arts, Media and Communication at CSUN, that gave us monetary support for our trip. We also want to thank Richard Zaldívar from The Wall/Las Memorias, who co-sponsored the project, and Rubén Tapia form KPFK, who taught us how to put together a radio package.
Ana Cubías
Editor of El Nuevo Sol